Ayer, “cotilleando por Facebook”, vimos en el muro de Brunella este vídeo tan genial. Resulta curioso darnos cuenta cómo a medida que nos vamos haciendo mayores perdemos ese instinto animal con el que nacemos y pasamos a ser humanos, personas mayores.
Quizás lo mejor de todo el vídeo es cómo estos peques encuentran a sus madres utilizando aquello a lo que los mayores damos tanta importancia: la vista. A veces es mejor dejarse guiar por otras cosas como el tacto, el oído o simplemente la emoción pero a medida que crecemos volcamos en el sentido de la vista mucho de nuestro poder de decisión. A veces hay cosas que es mejor decidirlas de otra manera.
Fuente: aplus.com
